Fractura radicular: qué es, causas, síntomas y tratamiento
Las fracturas radiculares se definen como secuelas extrañas de traumas en las piezas dentales.
Se dice que son extrañas, pues su aparición se da entre 0, 5 y 1% de todos los casos que se presentan.
Las fracturas radiculares se definen como secuelas extrañas de traumas en las piezas dentales.
Se dice que son extrañas, pues su aparición se da entre 0, 5 y 1% de todos los casos que se presentan.
Las fracturas radiculares son lesiones complejas que afectan comúnmente al maxilar superior. Dichas fracturas afectan áreas como la pulpa o nervio dental, el ligamento periodontal, la dentina y el cemento. Una señal que indica que se padece de fractura radicular es el dolor que siente el paciente al masticar.
Es importante mencionar que las fracturas radiculares aparecen más comúnmente en los dientes permanentes, por ejemplo, en pacientes de entre 12 y 21 años de edad. Asimismo, afectan los dientes temporales, especialmente a los niños entre 3 y 4 años de edad.
Un dato interesante es que las fracturas radiculares se logran curar en alrededor de un 75% de los casos, mientras que en otros, se desarrollan necrosis pulpares que requieren tratamientos de endodoncia o la extracción de la pieza dental afectada.
Consecuencias de las fracturas radiculares
Algunas de las secuelas de las fracturas radiculares (según lo proponen Andreasen y Hjörting-Hansen) son las siguientes:
1. Cicatrización que contiene tejido calcificado: En este caso, las radiografías presentan una línea de fractura, sin embargo, los fragmentos mantienen un contacto bastante estrecho.
2. Reparación que incluye tejido conectivo interproximal: Aquí, las radiografías muestran que los fragmentos están separados por una línea angosta, asimismo, los bordes de los fragmentos se observan de aspecto redondeado.
3. Cicatrización que incluye hueso interproximal y tejido conectivo: En este caso, las radiografías muestran que los fragmentos se encuentran divididos por un puente de hueso demarcado.
4. Tejido inflamatorio interproximal y ausencia de reparación: En este cuarto y último caso, las radiografías muestran un ensanchamiento de la línea de fractura.
Finalmente, hay que tener en cuenta que si las fracturas radiculares no son tratadas a tiempo por el cirujano maxilofacial, pueden causar problemas bucodentales e infecciones mayores que dificultan la terapia y el tratamiento posterior.