Face Clinic, Clínica Premium

Premium vs. ‘low cost’

Guía práctica de Face Clinic para no jugarse la salud en las intervenciones de cirugía plástica, medicina estética, estética dental y trasplantes capilares.

El intrusismo, las cadenas ‘Low Cost’ y la falta de formación de los profesionales implicados son los tres grandes peligros que acechan las intervenciones de cirugía y medicina estética.

Face Clinic, reivindica la calidad, la seguridad, el seguimiento continuo y el trato personalizado, desvelando todas las claves que diferencian un centro Premium de aquellos Low Cost donde los bajos precios son un reclamo que casi siempre oculta malas prácticas:

DATOS QUE DAN QUE PENSAR…

España, con más de 473.000 mil actos realizados, ocupa el puesto número 12 en el ranking de intervenciones estéticas (con y sin bisturí), según la International Society of Aesthetic Plastic Surgery (ISAPS).

(Datos de 2017) La Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE) denuncia que en España más de 10.000 médicos practican actos en clínicas estéticas, pero solo 1.200 poseen la titulación adecuada. De ahí que se hayan “inventado” especialidades como Cirujano cosmético o Cirujano plástico facial, titulaciones que no están homologadas por el Ministerio de Sanidad y que no cuentan con las garantías necesarias para el paciente, ya que pueden poner en riesgo su salud.

Para visibilizar tal intrusismo, SECPRE lanzó este año la campaña #PIDENOSELTITULO en redes sociales para educar y concienciar de la importancia de las acreditaciones académicas de cualquier profesional de la salud que ejerza como tal en España.

El negocio de la cirugía y medicina estética con el objetivo de mejorar y rejuvenecer rostro y cuerpo mueve más de 1.000 millones de euros en nuestro país, con un gasto medio de 500 € en tratamientos de medicina estética y unos 2.000 € en intervenciones quirúrgicas.

SEGURIDAD Y CALIDAD FRENTE A LOS RIESGOS ‘LOW COST’

El intrusismo, las cadenas ‘Low Cost’ y la falta de formación de los profesionales implicados son los tres grandes peligros que acechan las intervenciones de cirugía y medicina estética, según ha denunciado recientemente la Asociación Española de Cirugía Plástica y Estética (AECEP). Peligros que ponen en riesgo no solo los resultados buscados, sino la salud del paciente.

Face Clinic, primera clínica multidisciplinar de España dedicada al diagnóstico y tratamiento integral de la belleza, la salud y el bienestar que aúna alta tecnología con un equipo de primeras figuras en cada una de sus especialidades.

Cirugía Plástica y Estética, Oral y Cirugía Maxilofacial en Madrid, Dermatología Clínica, Medicina Estética, Odontología y Rehabilitación Oral y Cirugía Capilar—, reivindica la calidad, la seguridad, el seguimiento continuo y el trato personalizado, desvelando todas las claves que diferencian un centro Premium de aquellos Low Cost donde los bajos precios son un reclamo que casi siempre oculta malas prácticas.

TODAS LAS CLAVES DE UN SERVICIO CLÍNICO PREMIUM EXPLICADAS POR CUATRO EXPERTOS:

Protocolo de diagnóstico y Primera visita

EN CLAVE PREMIUM

Entrevista personalizada con el especialista, historial clínico exhaustivo, salud frente a negocio, honestidad en los objetivos a conseguir.

El protocolo de diagnóstico y planificación de un tratamiento Premium debe seguir el mismo esquema que en el resto de la Medicina. Historia clínica, exploración, petición e interpretación de pruebas complementarias, diagnóstico y planificación de tratamiento. Todo ello realizado por el especialista médico que realizará el tratamiento.

LOW COST

En las clínicas ‘low cost’, con una potente estructura comercial y gran debilidad en la cualificación de los doctores, se eliminan todas las fases previas y es un vendedor quien hace la planificación y cierra un presupuesto antes de la valoración médica, afirma Francisco Riba, especialista en cirugía oral, maxilofacial, estética y plástica facial y cirugía reconstructiva Facial.

 “En el momento que un paciente entra en nuestra consulta por un motivo estético, no debemos olvidar que somos médicos y que la salud debe prevalecer sobre la estética. Si la salud del paciente no es la adecuada o por lo que solicita la consulta no es realista, se debe rechazar para el tratamiento”.

En la Unidad de Dermatología Clínica y Medicina Estética, además de corroborar a sus colegas, completa la visión de un diagnóstico de medicina estética previo al tratamiento: “es importante hacer una anamnesis (conjunto de datos que se recogen en la historia clínica de un paciente con un objetivo diagnóstico) para conocer fármacos que toma el paciente o patologías previas, que pueden hacer incompatible o no recomendable el tratamiento”.

Del mismo modo, hay que conocer tratamientos estéticos previos que se haya podido realizar el paciente, porque en algunos casos, como los inyectables, dichos productos podrían no ser compatibles.

Es muy relevante conocer y valorar el motivo de preocupación estética del paciente, así como sus expectativas sobre los resultados, para poder ofrecer las alternativas necesarias y explicar lo que va a conseguir con el tratamiento.

Tu primera visita debe ser con el médico o cirujano especialista que vaya a realizar el tratamiento, no con un comercial o gerente.

Documentación a entregar al paciente ANTES DE…

Información detallada y consentimiento informado “Lo correcto es entregar por escrito un plan de tratamiento, un presupuesto cerrado y un consentimiento informado, requisito este obligatorio desde el punto de vista legal, en el que se le explica al paciente los riesgos y contraindicaciones que dicho tratamiento puede acarrear”, explica Francisco Riba.

Además, el paciente debe obtener información oral o escrita, detallada sobre el procedimiento; si es un tratamiento láser, por ejemplo, saber qué tipo de láser se va a utilizar y qué va a producir en su piel, así como el número de sesiones necesarias. Si son materiales inyectables, saber qué tipo de material es y cuanta cantidad se va a infiltrar.

 “Lo correcto es entregar por escrito un plan de tratamiento, un presupuesto cerrado y un consentimiento informado, requisito éste obligatorio desde el punto de vista legal”

Documentación a entregar al paciente DESPUÉS DE…

Informe detallado de la intervención, recomendaciones tras el alta, tarjeta identificativa (cuando hay prótesis) y lote (cuando son inyectables).

Tras una intervención quirúrgica, el paciente debe tener un informe con los detalles de la operación, recomendaciones y medicación para tomar al darle el alta y, si se ha colocado algún implante, la tarjeta identificativa del mismo que aporta el fabricante; este informe debe ir firmado siempre de forma inequívoca por el cirujano que ha realizado la intervención”.

En el caso de los inyectables, siempre se debe entregar el lote del producto, para que el paciente sepa lo que se ha puesto. Este también queda registrado en la clínica junto con el consentimiento informado”.

En los tratamientos como el peeling químico facial o láser se informa del procedimiento hecho y las medidas a tomar en los días siguientes.”, comentan los dermatólogos.

Informe detallado de la intervención, recomendaciones tras el alta, tarjeta identificativa (cuando hay prótesis) y lote (cuando son inyectables).

Recortes encubiertos ‘Low Cost’ para abaratar el tratamiento

Prótesis y materiales de primera calidad, alta tecnología, anestesia o sedación controlada por un anestesiólogo, quirófanos con garantías, inyectables seguros y dosis óptimas.

En el caso de la Odontología, comenta el experto, lo más común es utilizar materiales de segunda o tercera línea (aunque todas las clínicas publicitan “implantes de gama alta”), mantener materiales y formas de trabajo tradicionales sin actualización tecnológica (por ejemplo, utilizar la fundición en estructuras metálicas en lugar del CAD CAM, diseñadas por ordenador).

Existe la sospecha de que las cadenas dentales Low Cost compran grandes volúmenes de implantes que no han pasado los controles de calidad”, comenta Francisco Riba.

En lo referente a las intervenciones de cirugía plástica, incluido el injerto capilar, el doctor explica que generalmente el abaratamiento de los costes en una intervención se consigue mediante uso de prótesis de calidades y precios inferiores y con menores garantías. No ingresando a los pacientes en intervenciones que lo requieren, utilizando quirófanos no habilitados para cirugía mayor, operaciones llevadas a cabo por médicos sin titulación oficial o haciendo sedaciones y anestesias no realizadas por anestesiólogos.

En Medicina estética, apuntan los dermatólogos, “lo más común es utilizar materiales más baratos o en menor cantidad. Los neuromoduladores para las arrugas tienen un coste elevado, si el precio que nos dan es demasiado bajo, debemos sospechar que la cantidad que se pondrá será muy pequeña; en los establecimientos Low Cost es frecuente compartir viales de neuromoduladores entre varios pacientes cambiando las diluciones para conseguir más volumen de inyectable con un efecto mínimo o nulo”.

El mercado de los rellenos, como el ácido hialurónico, es muy amplio, las marcas con más trayectoria en el mercado y de laboratorios más reconocidos, tienen un coste más elevado, pero son las que nos aportan más seguridad y mejores resultados.

Respecto a los tratamientos láser, estos se pueden abaratar, realizándolos con más baja energía para así aumentar el número de sesiones, o con aparatología de menor calidad, que no obtendrá los mismos resultados.

Cómo detectar al profesional ‘low cost’

Titulación reconocida y homologada.

En el caso de una intervención de cirugía mayor, lo más importante es que el cirujano tenga la titulación necesaria y obligatoria para las intervenciones quirúrgicas que vaya a realizar”.

Eso se puede comprobar consultando en el Colegio de Médicos de la provincia donde ejerza su cirujano.

En nuestro caso se puede consultar en la página web del Ilustre Colegio de Médicos de Madrid (www.icomem.es) y en la página web de la SECPRE (www.secpre.org).

Hay que recordar que en estética la única titulación oficial es la de Especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora”.

Para su colega el Dr. Riba, además “es importante dar visibilidad al Curriculum y trayectoria profesional del médico, dar oportunidad al paciente para averiguar quién va a tratar de resolver su problema y que sea siempre un doctor el que pase la primera visita y planificación, no un comercial”.

Además, hay que tener siempre en cuenta que “el profesional experto en administrar una sedación (o anestesia general) debe un médico con título de especialista en Anestesiología y Reanimación, comenta el anestesiólogo José Ángel Palomo.

Riesgos, complicaciones y peligros ‘Low Cost’ en los procedimientos más populares.

En clave Premium: Manos expertas, calidad de los materiales, hospitalización adecuada, seguimiento posterior.

1. Implantes y rellenos: Lo más frecuente es que se obtenga menos resultado del deseado. El peligro puede aparecer sobre todo cuando se utilizan materiales no autorizados en el mercado y que, por lo tanto, no tienen un control. Hay casos descritos de reacciones alérgicas a productos de origen chino, no autorizada para su uso en España, afirman los dermatólogos.

2. Prótesis e implantes (mamas, glúteos, etc.): “En general, los riesgos vienen asociados a la forma de trabajo, como los riesgos inmediatos por las altas hospitalarias precoces, en el caso de tener un sangrado, un síncope, algún problema con el drenaje el paciente no está rodeado de personal sanitario como cuando están ingresados en un hospital. En las clínicas low cost hay mucho relevo de médicos y muchas veces no existe un seguimiento a largo plazo por el mismo especialista en la operación de pecho en Madrid”. Además, si se utilizan prótesis de baja calidad, existen más problemas de encapsulamiento, desviación y mala posición.

3. Rinoplastia ultrasónica: Deformidad, asimetría, infección. Dificultades respiratorias.

4. Blefaroplastia: Imposibilidad de cerrar los ojos, cicatrices patológicas, asimetrías.

5. Liposucción: Irregularidades y hundimientos en zonas donde se extrae exceso de grasa. Deformidades. Lo mismo ocurre con la abdominoplastia.

6. Implantes dentales: Infección y pérdida masiva de hueso, sinusitis, hemorragias graves, colapso respiratorio, alteraciones estéticas por exposición de metal, imposibilidad de rehabilitar el implante.

7. Estética dental (ortodoncias, carillas, blanqueamientos…) Resultados antiestéticos, lesión de raíces y pérdida de dientes, infección de dientes, asimetrías, patología y dolor articulación.

8. Injertos capilares: Foliculitis (infección del folículo piloso) masivas, placas sin pelo post infección, asimetrías, inaceptable porcentaje de supervivencia de los folículos, asimetrías y alteraciones estéticas.

Intervenciones que sí son ambulatorias

En clave Premium: cirugía menor, tratamientos mínimamente invasivos, vigilancia anestésica.

Cada vez son más los procedimientos que con una adecuada valoración del paciente y con todos los medios de seguridad pueden hacerse como cirugía ambulatoria. De hecho, la evolución de la medicina tiende a una menor hospitalización, favoreciendo las altas precoces y recuperaciones y seguimientos domiciliarios”.

En el quirófano de cirugía de FACE CLINIC, perfectamente equipado, se pueden hacer todos los procedimientos de cirugía menor (liposucciones pequeñas, cirugía de los ojos, otoplastia, cirugía oral) sin ningún sufrimiento para el paciente mediante anestesia local (que anula el dolor de la zona a operar) y sedación (que produce relajación y somnolencia con olvido del tiempo transcurrido, adormilado) completamente seguro contando con la vigilancia monitorizada por un médico anestesista”, explica José Ángel Palomo, médico anestesiólogo.

Las intervenciones de cirugía menor, se realizan en nuestro quirófano de la Clínica en Diego de León, para mayor comodidad de los pacientes.
  • En un quirófano ambulatorio se deben realizar solamente procedimientos de cirugía menor: pacientes sanos, procedimientos de baja agresividad con escasa probabilidad de complicaciones, como es la liposucción de una zona pequeña, lipofilling, corrección de cicatrices, tumores cutáneos. En muchos de estos procedimientos, a pesar de ser ambulatorios, se requiere vigilancia anestésica y sedación.
  • En cirugía oral maxilofacial, prácticamente el 80% de la cirugía oral y cirugía facial menor. Implantes, reconstrucciones maxilomandibulares.
  • En lo referente a la medicina estética, “la mayoría de inyectables, láseres o peeling son procedimientos ambulatorios en consulta“.

Intervenciones quirúrgicas que precisan hospitalización y anestesista

“Todos los procedimientos que se realizan bajo sedación (en quirófano de cirugía ambulatoria) o bajo anestesia general (en hospital) están sometidos a los mismos criterios de seguridad anestesiológica: Valoración preoperatoria, vigilancia por anestesista durante todo el procedimiento, monitorización continua de constantes vitales, dotación de seguridad para eventuales emergencias, médicos anestesistas entrenados, seguimiento postoperatorio”, aclara el doctor José Ángel Palomo.

A lo que el doctor añade: “salvo la extirpación de pequeños tumores cutáneos, corrección de cicatrices, por ejemplo, de abdominoplastia o procedimientos que se realizan con anestesia local, sin sedación, todas las intervenciones quirúrgicas deben ser realizadas bajo el control de un anestesista que deberá permanecer junto al paciente durante toda la intervención y hasta que hayan pasado los efectos de la anestesia o de la sedación y no haya riesgos de complicaciones de esa anestesia.

Te invitamos a solicitar una cita sin compromiso en una de nuestras clínicas de medicina estética para valorar tu caso de forma personalizada.

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