1. Falta de definición en pómulos y mejillas: La falta de definición en los pómulos y las mejillas puede hacer que el rostro parezca plano o carente de volumen. Esto puede ser el resultado del envejecimiento, la pérdida de grasa facial o factores genéticos.
2. Retroceso del mentón: El retroceso del mentón, también conocido como retrognatia, se refiere a una mandíbula inferior que no sobresale lo suficiente, lo que puede dar una apariencia de perfil débil o desequilibrado. Esto puede ser causado por factores genéticos, desarrollo mandibular deficiente o trauma facial.
3. Nariz prominente o desproporcionada: Una nariz grande o desproporcionada puede dominar el rostro y afectar su equilibrio. Esto puede ser el resultado de una nariz grande de forma natural, una giba nasal prominente, una punta nasal caída o asimetría nasal.
4. Hundimiento de las órbitas oculares: El hundimiento de las órbitas oculares puede crear sombras oscuras bajo los ojos y dar una apariencia de ojos hundidos o cansados. Esto puede ser causado por la pérdida de volumen en el área periocular, el envejecimiento o factores genéticos.
5. Pérdida de volumen en los labios: La pérdida de volumen en los labios puede hacer que parezcan delgados o planos, lo que puede afectar la simetría y la armonía facial. Esto puede ocurrir con el envejecimiento, la pérdida de grasa facial o factores genéticos.
6. Asimetría facial: La asimetría facial se refiere a desequilibrios en la estructura facial, como diferencias en la altura o el tamaño de los pómulos, las mejillas, la mandíbula o las órbitas oculares. Esto puede ser causado por factores genéticos, trauma facial o desarrollo mandibular irregular.
8. Pérdida de definición en la mandíbula: La pérdida de definición en la mandíbula puede hacer que el contorno facial parezca menos definido o angular. Esto puede ser el resultado del envejecimiento, la pérdida de grasa facial o factores genéticos.
9. Frente plana o falta de contorno en la frente: Una frente plana o sin contorno puede afectar la apariencia general del rostro, especialmente en el perfil. Esto puede ser el resultado de factores genéticos o desarrollo frontal deficiente.
10. Envejecimiento facial: El envejecimiento facial puede manifestarse con la pérdida de volumen, la laxitud de la piel, la formación de arrugas y la flacidez en varias áreas de la cara, lo que puede afectar la proyección y la apariencia general del rostro.